De la sierra bajó con pasamontañas
Cargando fusil en mano y con frio en las entrañas,
Los arboles le susurraban al oído
El mal gobierno se ha ido,
El respondió ¡la lucha sigue!,
Las aves y venados dijeron
Ese
hombre la muerte persigue,
Cansado de buscar justicia y libertad
A un indio en el bosque fue a encontrar,
Entre hierbas y agua le hizo recostar
Y con ayuda del peyote comenzó a alucinar,
Entre humos el comandante Guevara apareció
Y le dijo tu lucha es interior,
El viento le beso el rostro y despertó.
El
corazón golpeando el pecho se encendió.
Al hombre y mujer que lucha
El corazón y la mente se deben dejar escuchar
Para el espíritu elevar
Y al enemigo derrotar.